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ARTUR RAMON ART (Barcelona)

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PERE i JOSEP SANTILARI
Del Vanitas al Bodegón, entre libros de Arte

Interior de la galeria en Carrer de la Palla, 23

Quien suscribe estas líneas hacía un par de años que no acudía la Artur Ramon Art.

El hecho de haber cambiado de domicilio – del entrañable y accesible carrer de la Palla, 23 a Bailen, 19 – y otros temas que han reclamado mi atención, a pesar de seguir visitando exposiciones, fueron los principales causantes de un distanciamiento no deseado.

No obstante, a principios de julio, y ante las muestras citadas en el título del artículo, se impuso realizar la pertinente excursión galerística.

Teniendo en cuenta que el propósito inicial de la Artur Ramon en Bailén era según nota de prensa del 31 de mayo de 2016: Un nuevo proyecto ha sido ideado para proyectar (valga la redundancia) el arte de Barcelona al mundo, donde se potenciarán principales activos artísticos locales y donde, a su vez, se reforzará la propuesta artística comprometida con el coleccionista culto privado y público.

C/ Bailén, 19

Un talante con aire muy europeo, de nivel y poco dado por nuestros lares, por lo que no debe sorprender que para acceder a visitar las exposiciones, se deba de llamar al interfono del edificio – en su mayoría viviendas – con un local para exhibición especializado en arte contemporáneo con cristalera al exterior, mientras que para visitar las muestras, excelentes, aquellas que solo son apreciadas por el “connaiseur” , o un amante de la exquisitez del arte, haya que subir unos cuantos peldaños de una majestuosa escalera, con suelo ajedrezado, aunque el ascensor esté disponible.

Llegados al Principal, con correcta atención dispensada por la ayudante o becaria de turno, con funciones de supervisión, la nueva Artur Ramon Art se desenvuelve entre un pasillo amplio que permite exhibición de obra, en este caso la del pintor Marià Andreu y el hecho de adentrarse hacia una amplia biblioteca, en cuyos estantes se aprovecha para colgar los vanitas y bodegones de los hermanos Santilari.

Pere Santilari - Vanitas - (2016) - Óleo sobre lienzo

La atracción que ejerce la curiosidad por ojear los libros perfectamente ordenados en los estantes, por respeto y por la vigilancia citada, queda rápidamente substituida por la educación y la visión de las obras Santilarianas, aunque entre tanto volumen, centrarse en los siempre sublimados bodegones de dos hermanos gemelos, unidos por la familia, el aspecto físico y el pictórico, es un tanto difícil.

Sin embargo, y como puede verse por las imágenes, sus obras siguen teniendo esa sublimación del bodegón – alguna, como sus nueces fue exhibida ya en 2015 - , y ese “mirar dentro de la propia tumba”, que el genial Settembrini, personaje clave de “La montaña mágica de Thomas Mann”, aplicó a la contemplación de una radiografía, y que perfectamente puede adaptarse  al“memento mori” de los Santilari, en este caso de Pere en la que, en algunas piezas, no deja de entreverse toque de humor negro.

Pere Santilari. Vanitas con gafas

Sus trabajos reflejan a la perfección el sentido de vacuidad o insignificancia, a través de un alto valor simbólico, y en los que, al igual que en el siglo XVIII, sigue vigente la inutilidad de los placeres mundanos frente a la certeza de la muerte, aunque metidos de lleno en el siglo XXI, la simbología de Pere Santilari sea muy austera, centrándose exclusivamente en el ciclo de la vida: nacemos para morir, y no nos llevamos ni las gafas.

Josep Santilari - El Artista - óleo sobre lienzo

Con respecto a la Naturaleza Muerta, flores y frutos secos configuran un temario donde el silencio del bodegón, dentro de una gama cromática en la que abundan grises, Josep Santilari se expresa con meticulosidad, excelente factura, y una plasmación que casi roza el hiperrealismo. A pesar de ser un bodegón, puede aplicarse a la pieza su nombre en inglés "still live".

Pere Santilari - Flores de almendro - Óleo sobre lienzo

Al contemplar la excelente calidad de la obra, entre libros y paredes, una no puede evitar preguntarse: ¿Qué relación existe entre esa realidad del bodegón y de los objetos que describe?

Flores, esbeltas, hermosas, elegantes, soberbias, deliciosamente dibujadas, que saben transmitir el placer visual y la emoción sensorial, ¿Existen de verdad o más en nuestra imaginación? Puede que la respuesta es que en sus trabajos hay algo de ambas, con objeto de enaltecer el goce visual de la pieza.

Hermanos Pere i Josep Santilari - Vista general de la muestra - Artur Ramon Art

Un universo trascendental, el de los hermanos Santilari, que muestran es una realidad que ambos saben abordar de forma periférica. Los objetos representados son ante todo percepciones puramente sensoriales. A través de la manipulación química de los pigmentos o la estática de las estructuras tridimensionales, sabiendo plasmar, con distinción absoluta, a su vez lo puramente óptico, y el silencio que lo envuelve.  Estoy segura que Zurbarán se sentiría identificado con ellos.

Lástima de la inexistencia de cartelas en la muestra. Algunos datos han sido extraídos de Instagram, y de la memoria de quien firma esta crítica.

ARTUR RAMON ART
C/ Bailén, 19
Barcelona
www.arturamonart.com

 

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